Luna.

Dicen que según naces,como naces y donde naces la vida que se te pone por delante va marcando el inicio de tu destino.

Quizás sea cierto, y por ello pienso que mi madre me llamo Luna,por que nací de noche, y casi dos meses antes que las demás personas.

Ella siempre dice que tengo prisa para todo, pero a la vez no se me escapa un detalle, soy observadora y curiosa desde que nací, mi madre cuenta que abría mis pequeños ojos, que aun no veían, como si estuviera divisando todo mi alrededor.

Siempre he estado orgullosa de la ciudad donde nací, esta ciudad de azahar, despierta, graciosa de gentes amables y sencillas, esta ciudad que Miguel Bose, le cantaba...

Y el corazón a Triana va nunca volverá Sevilla, con que pasión te enamorara, y te embrujara Sevilla.

Desde luego sabe lo que dice y lo que canta, no hay duda.

Adoro mi profesión, aunque a veces se entorne peligrosa, siempre quise ser periodista en países lejanos, pero desde que entre a la editorial en la que trabajo,mis sueños viajeros se esfumaron.

Mi jefe siempre dice que soy de las mejores profesionales que tiene, y deber ser así por que me cuida al detalle, entiende y comprende que a veces la base de un buen texto es la inspiración, de una noticia  el saber contrastarla y de un mejor articulo  la pasión, esfuerzo y corazón que le pones.

Que soy pasional, soñadora y luchadora es un secreto a voces, aunque  mi vida ahora este pasando por uno de los peores momentos.

Si por que una ruptura sentimental, es difícil de superar y mas cuando no te la esperas, ya que a veces aunque tengas problemas, piensas y deseas solventarlos.

Creo que la excusa que tuvo mi novio, para desecharme, era solo eso, una excusa,  y no un motivo suficiente para poner punto y final a nuestra vida en común.

Me consuelo pensando, que es un cobarde por no decir el por qué y aunque a veces me haga esta pregunta derramando lágrimas, se que no encontraré otra respuesta, que no sea su cobardía y egoísmo.

Estoy tan afectada que a veces no doy pie con bola, incluso me da miedo conducir por que se me va la pinza  y a veces ni se donde voy, por ello he empezado a utilizar el transporte publico, digamos me he vuelto algo adicta al metro, rapido y eficaz.

Gran parte del día lo intento ocupar trabajando para mantener la mente sin pensar en quien no debe, por que estoy tan segura que el olvido en un pis pas,  me siento tan ridícula llorando por quien no me ama, pero ya se sabe que el corazón tiene motivos, que la razón no entiende.

Lo peor es cuando llego a casa y lo primero que hago es gritar Cariño ya estoy aquí, como si el aun estuviera, sin acordarme a veces que se fue para no volver.

Continuara...