Vuelvo un verano más a esos pueblos hermanos, semejantes al que en la pequeñez, me llenaba de alegría, esperar todo un largo invierno, para recorrer cada uno de los empedrados de sus calles, para abrazar sus blancas paredes encaladas, admirar cada farola, perderme en puertas y ventanas artesanas, curtidas de historias y vidas, que solo ellas saben guardar en largos y perpetuos secretos.
Afortunadamente poco cambian estos pueblos llenos de esencias, de quienes cultivan las tierras, y miman sus frutos como trofeos de campeonatos propios , de duro esfuerzo.
Gentes que cuidan sus calles, su entorno, sus arboles.
Aún recuerdo mi sorpresa, al ver aquellos lavaderos públicos, donde las mujeres entre cánticos y sudores, lavaban sabanas y paños menores.
Todavía hay quienes se sientan en la puerta, sillas de eneas que año tras año, pasan veranos al fresquito y con historias que contar.
Aún recuerdo mi sorpresa, al ver aquellos lavaderos públicos, donde las mujeres entre cánticos y sudores, lavaban sabanas y paños menores.
Todavía hay quienes se sientan en la puerta, sillas de eneas que año tras año, pasan veranos al fresquito y con historias que contar.
Niños que juegan en la calle, en los parques sin peligros, libres como el viento, ese que acaricia cada hoja de árbol, ese mismo viento que roza mi piel y hace que cierre los ojos, lo aspire, y me sepa a eucaliptos, esos grandes guardianes en las entradas de estos pueblos de la sierra de Huelva.
Observo en cada esquina, y todo me trae aroma a recuerdos, se renueva mis memorias de días felices, escapándoseme sonrisas de placer.
Como se alborota mi corazón, con lo conocido y con el tiempo perdido.
Marrones tejados, verdes paisajes, cielo azul limpido, fachadas engalanadas, flores listas para ser admiradas, senderos que paso a paso se van descubriendo.
Diversos arboles, tierras , puentes , curvas, subidas y bajadas, aguas que brotan, montañas que te observan, paseos que son vida, un regalo para la vista y deleites para los sentidos.
Así y ahora, todo es paz.
Todo se renueva.
Inma_Luna
Fotos propias derechos reservados
24 comentarios:
Me has traído a la memoria mi niñez. Qué paz de veranos.
Beso, Inma.
Aquellos lavaderos en que se contaban todas las noticias sabrosas y compartían duros trabajos. Besetes.
Que bonitos los recuerdos que llegan con estas imágenes, por cierto las fotos son geniales. Saltos y brincos
Un post genial, a mi tambien me has hecho recordar mi niñez.
Un abrazo inma.
revivir esos recuerdos alargan la vida.
Cuántos secretos, lágrimas, risas guardan esas plazas, esas paredes, esas calles.
uuuff Inma me ha encantad tu relato lleno de pasajes de historias de sentimientos y recuerdos profundos pero también llenos de magia donde estas fotos hermosas cobran vida bellísimo!!! tu trabajo un besos desde mi brillo del mar
Qué bonitas vacaciones huyendo del cartón piedra y buscando la autenticidad. Bonito ejemplo. Saludos.
Hola Imma, me has hecho rememorar mi infancia con este relato tan bonito.
Es cierto que los recuerdos de la infancia nunca se borran.
El visitar el pueblo donde de pequeña has veraneado, tan solo el olor te transporta en el tiempo y revives aquellos veranos.
Mil besos corazón
En las ciudades tenemos muchas comodidades, pero nada comparable con esa paz y tranquilidad de los pueblos con su esencia. Bonitos recuerdos, un abrazo
¡Quién no recuerda, Inma, esas vivencias de infancia, en el marco de lo que es para todo niño la aventura de cambiar de aire y de visiones!Vale para cada uno de nuestros países.Si va adherido al sabor de un huevo duro para aligerar el viaje, o algún manjar similar, mejor todavía.
Un beso austral.
No tengo el privilegio de tener un "pueblo" al que volver en vacaciones, pero la emoción debe de ser muy grande.
Disfruta y muchos besos!! Helena
Bellísima entrada, me encantaría recorrer esos pueblos cargados de historias
Besos
Benditos los pequeños pueblos donde todavía reina la paz y la concordia y el respeto por los valores, un abrazo Inma!
Un placentero paseo por tus memorias acompañado de preciosas imagenes en las que parece haberse detenenido el tiempo logrando que tu goces mas los recuerdos de antaño.
Un placer visitarte.
Besos.
Que ootod tan bonitas, parece extraño que se puedan mantener recuerdos porque desaparecen muchas cosas
Feliz verano
Hay una dulzura en la vuelta al pasado que embriaga los sentidos, limpia los recuerdos y los convierte en días luminosos antes de que la vida viniese a cobrar su tasa de pérdida y lágrimas.
Disfruta ese agua que canta desde tantos rincones
Un beso
Es que en esos recuerdos nos identificamos con los mejores años de nuestra niñez. Y que me dices de recordar los olores de entonces. Como entras en una cambra, ahora vacía, y te llenas de efluvios de manzana, de algarrobas ..
A mi me gusta mucho evocar el pasado .
Tu hermoso y entrañable recuerdo me ha encantado. Y las fotos son muy bonitas.
Un besito.
Una belleza de imágenes querida Inma_Luna y tu escrito ni se diga ni se pida más .... besos preciosa :*
Lindas fotografìas, bellos recuerdos esbozando dulcemente
momentos vividos, àlgidos y tan humanos, que nos hablan
y se manifiestan indelebles en nuestro corazòn, en
nuestra alma, como sonrisas sin precio alguno,
ya que ello con todo sus componentes nos abrigaron
para continuar por el camino en la vida
hasta donde hemos llegado!
Fascinantes fotografìas y tus palabras.
Besos
con todo cariño!
Olá Inma.
Sua bela crônica diz bem da importância que tem para todas as pessoas que viveram em um lugar retirado dos grandes centros, com suas vidas pacatas, pessoas que vivem do seu trabalho, tão necessário para o sustento. E o que torna melhor a volta a essas vilas é lá encontrar tudo o que de bom tinha em tempos passados, e que ficaram registrado nas mente de quem lá esteve.
Parabéns também pelas fotos..
Abraço.
Pedro.
que bonito todo!, regresar a esos pueblos y esa paz.
disfruta, renueva energía y llénate de vida.
saludos
Que paz y que tranquilidad.
Eso son vacaciones.
Lo otro, lo de las vacaciones enlatadas, es una locura desenfrenada.
Besos.
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