ASHAALI (CAPITULO VEINTIOCHO).


Hija,Fulki, veniros al pueblo a casa a nuestra casa, allí tendréis cobijo, ya buscaremos soluciones, pero quiero ver a mi nieto cerca.
-Madre, yo no le guardo rencor a mi Fulki, creo que le guardo gran cariño siempre se comporto bien conmigo, excepto el error que cometió, pero si se viera por otro lado, lo que hizo a mi me premio la vida, encontré a mi adorada anciana, aprendí a vivir rodeada de flores y encontré el verdadero AMOR.
Pero yo no lo amo, no quiero vivir con el, pero si cerca por que quisiera saber a menudo de el.
A lo que Fulki contesto:
-Un divorcio, es imposible para nuestra economía, aparte de ser un proceso largo y costoso,para nosotros es impensable, pero, por mi eres libre si es que mi palabra te basta.
Quisiera que vivieras con el padre de tu futuro hijo y que seas feliz sea donde sea y donde quieras.
-Gracias Fulki, dijo Kanira, te parece bien ayee?
-Solo quiero que vivas lo que yo no he vivido, que luches por lo que te compense, pero no me apartes de tu lado ni del de la criatura .
Mientras la suegra enfurecía, blasfemaba, pero nadie la tenia en cuenta.
Yo también quiero estar cerca de ti Kanira, dijo Fulki.
Así, sera y en un fuerte abrazo, se embutieron, las dos personas que fueron obligadas a unirse en matrimonio acordado.
-Madre, decía Fulki, no dejare que hagas con mi hermana lo que hiciste conmigo.
Siempre me has reprochado, que no era lo suficiente hombre, para ser el cabeza de familia, pues bien, hoy y ahora tomo el papel quieras o no, y se hará lo que yo creo que es justo, sin imposiciones ni ordenes.
Mi hermana va a ser feliz, y sera responsable de sus actos aprendiendo por ella misma lo que le depare la vida, sabiendo que yo estaré para lo que necesite.
La muchacha corrió a los brazos de su hermano, que de besos y cariño le daba.
No te queda otra anciana madre, que aceptar lo que queremos.
La vieja creía enloquecer...
Fuera todos de esta casa, de mi vida, si queréis libertad y ser dueños de la vida que yo os he dado y de la que para nada estáis agradecidos, ni sabéis lo que es respetarme, iros lejos y no volváis, os desprecio y no quiero estas paredes ni esta estancia llena de vuestras malas presencias.
-Si madre, nos vamos, no podemos luchar ni razonar con quien no quiere.
Solo recordarte, que si de verdad nos necesitas nos busques.
FUERA MALOS HIJOS...


Continuara...




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